El sector inmobiliario de la provincia viene percibiendo buenas sensaciones prácticamente desde que se superó la tercera ola de la pandemia a principios de año, con una recuperación de las ventas que, a falta de datos oficiales, muchos promotores aseguraban que habían vuelto a niveles prepandemia, como ha venido contando Alicante Plaza. Ya hay datos que lo corroboran: la estadística de transacciones inmobiliarias del Ministerio de Vivienda (que toma los datos de los registros de la propiedad) muestra que en los primeros seis meses del año no solo se vendieron prácticamente las mismas viviendas que en 2019, sino que se facturó más por ellas.