El Alto Representante de la UE para Política Exterior, Josep Borrell, se ha marcado este lunes como objetivo un embargo al petróleo ruso como próxima sanción en represalia a la guerra en Ucrania, que entra en una nueva fase con el recrudecimiento del conflicto en el Donbás.
«Es importante empezar por el petróleo, que representa una gran factura y es fácil de reemplazar», ha afirmado en rueda de prensa desde Luxemburgo, tras la reunión de ministros de Exteriores que ha servido para lanzar este debate.