Los mercados siguen celebrando la aparente derrota de la inflación, lo que ha llevado a las bolsas de todo el mundo a alcanzar nuevos máximos históricos. Las divisas relacionadas con las materias primas y las de los mercados emergentes se unieron a la fiesta la semana pasada, y los valores refugio tradicionales como el yen japonés, el franco suizo y, esta vez también el dólar, sufrieron, mientras que el dólar neozelandés encabezó la clasificación de rendimiento de las divisas a nivel mundial. El ambiente de celebración en los mercados financieros es aún más destacable si se tiene en cuenta que los recortes de tipos de la Reserva Federal siguen aplazándose hacia el futuro.
Esta semana todo girará en torno a la inflación. El informe de Estados Unidos es ahora la publicación económica más importante del mundo, y los datos relativos a enero que se publicarán mañana martes serán el principal foco de atención del mercado esta semana, seguido por el informe equivalente del Reino Unido al día siguiente. Siguiendo con el tema de que la recta final en la lucha contra la inflación será la más dura, los mercados esperan una cifra mensual del índice subyacente de EE UU coherente con una inflación anualizada del 3,5%-4%. Cualquier sorpresa significativa en este respecto podría disparar la volatilidad.